Entrevista publicada en el portal
A tu Salud en línea.com
La prostatitis es una inflamación
de la glándula prostática, el signo más evidente y frecuente es el dolor en el
área perineal (detrás de los testículos), el paciente refiere como una especie
de opresión. También puede presentar síntomas de infección urinaria, y signos
como si se tratase de una cistitis.
El urólogo Franzo Marrufo explica
que cuando se presenta una infección prostática, es importante diferenciar en
qué grupo de hombre se está manifestando, porque en hombres menores de 45 años,
por lo general, se debe a una infección urinaria, o puede ser producto de una
enfermedad de transmisión sexual; mientras que en hombres mayores de 45 años se
puede producir por una obstrucción prostática.
Es importante destacar que las
relaciones sexuales sin los cuidados pertinentes pueden causar prostatitis.
Pero, actualmente la causa más frecuente por relaciones, son las causadas por
encuentros anales, para este tipo de relaciones es necesario usar preservativos
y así evitar infecciones que luego puedan desarrollar una prostatitis.
Existen dos grupos importantes en
la prostatitis, la aguda, que por lo general es una prostatitis infecciosa, que
se presenta en hombres menores de 45 años de edad, o en hombres que estén
empezando con procesos obstructivos de la próstata; y la prostatitis crónica,
que se presenta en hombres que han tenido prostatitis en varias ocasiones y
pueden, o no, haberse infectado nuevamente, mayormente se presenta en hombres
mayores.
El peor de los casos en la
prostatitis crónica es cuando no hay presencia de bacterias, porque existe un
daño significativo en la próstata; es decir, el paciente tiene una inflamación
crónica. De esta condición parte la dificultad de su tratamiento, ya que al no
haber infección hay que tratarla con antiinflamatorios y buscar un esquema que
pueda ayudar a controlarla.
“Una prostatitis aguda que no se
trate como es debido, va a tener complicaciones seguras a futuro”, asegura el
experto.
La glándula prostática tiene una
barrera que la defiende del paso de bacterias, indica el doctor Marrufo, pero
igualmente, impide el paso de antibióticos, por esta razón las infecciones
prostáticas hay que tratarlas por un mínimo de 15 días continuos, para mantener
los niveles de antibiótico constantes en la sangre, y que poco a poco puedan
penetrar a la próstata.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario